Los escenarios de la película “Amanece, que no es poco”, transcurre por los pueblos de Aýna, Liétor y Molinicos tres pueblos de la Sierra del Segura, donde el albaceteño José Luis Cuerda rodó su film más famoso film, en el verano de 1988.
Aýna es conocida como “La Suiza Manchega”. La iglesia de la Virgen de los Remedios acoge el Centro de Interpretación Amanece, que no es poco que hará la delicia de todos los amantes del cine surrealista. La gran mayoría de escenarios se encuentran al aire libre, por ello pueden ser visitados a cualquier hora del día.
En la Oficina de Turismo de Ayna se facilita un callejero con todas las localizaciones de los lugares del rodaje de las escenas, todos ellos marcados con grandes señales con una numeración y descripción de la escena rodada en el lugar. Existe la posibilidad de visitar todos estos lugares con visitas guiadas desde la Oficina de Turismo de Ayna.
Molinicos se encuentra en un enclave montañoso. Los escenarios de la película en Molinicos se disfrutan a través de un agradable paseo guiado por el casco antiguo y el museo “A cielo abierto”. El paseo recorre la parte baja del pueblo, que conserva muros y casas típicamente serranas, zonas naturales como la Charca de los Molinos y lugares arquitectónicos como el puente Arco Medieval.
Visita obligada se merece Museo Micológico “Casa del Níscalo” se centra en el estudio de los hongos, setas y trufas. Único museo de Castilla dedicado a la micología.
Liétor se convirtió en el pueblo más bonito de Castilla-La Mancha en 2017. Localidad donde también se rodaron algunos escenarios de la película de conocido cineasta. La Ermita de Belén podría ser la más representativa. Se recomienda pasar por la oficina de turismo y solicitar el folleto de la ruta cinematográfica. La ermita de Belén solamente puede realizarse mediante una visita guiada con la oficina de turismo.